El regreso del Chinchal

Tras el anuncio de que van a permitir pequeños negocios privados a los reclusos de la mayor cárcel del mundo, renacen las esperanzas y el optimismo se aloja efímeramente en las mentes de los infelices. Los planes y más planes llenan los ojos y las sueños, la posibilidad de crear y alimentar y hacer crecer algo de uno mismo,no del gobierno ó de fulano, que después comience a brindarnos frutos para mejorar nuestra calidad de vida y la de los que nos rodean, es el anhelo de millones en el mundo y en todas las etapas históricas que ha vivido el hombre. Pero el caso de Cuba, como todo lo que de allí emana, es muy diferente. Eso lo saben los más de doscientos mil cuentapropistas que en 1995 se lanzaron a lo desconocido con ahinco para tratar de buscarse los pesos a su manera, y más temprano que tarde enfrentaron tropezones cada vez mas seguidos, hasta que fueron en su mayoria derrumbados por las trabas burócratas y corruptas del propio sistema. La mayoría acabó en la cárcel, otros perdieron hasta el último kilito. El sueño concluyó pesadilla. Y es que un paladar tiene que comprar los alimentos y las materias primas en mercados oscuros,que son ilegales. El zapatero va al mismo sitio a conseguir la pega o la suela,y el taxista a resolver unas gomitas de medio palo para el almendrón.Como el Estado dueño y señor está en ruinas, y especula con lo poco que produce hasta convertirse en el mayor usurero, la calle es la opción única para abastecer a los nuevos negocios. Pero cuidado, que si te agarro comprando carne de res son veinte años, y unos camarones te los decomiso y te quedas hasta sin el viejo refrigerador de tu vieja casa, y esas tuercas son desvio de recursos, le estas robando al pueblo. Lo demas lo sabemos. Como mismo terminó la aventura de hace quince años: cárceles, quiebras, expropiaciones...La revolución es justa y no va a permitir que nadie se enriquezca a costa de los trabajadores. Vendrá otro plan maceta y una nueva ley de peligrosidad y a cerrar los chinchales. Mientras, pasarán lluvias y sequías y los degenerados de medio siglo no van a resolver nada, pero ganarán tiempo una vez mas, como siempre lo han hecho, para esperar a ver qué sucede mañana.